¡Cerdos, pónganse a temblar...!

No hay más dolor que perder un hijo… Lo dijo Alejandro Martí hace cuatro años, tras el secuestro y muerte de su hijo, Fernando. Hoy Humberto Moreira Valdés, exgobernador de Coahuila y exdirigente del CEN del PRI, cuando el mexiquense Enrique Peña Nieto pintaba para entrar a la carrera presidencial, ahora presidente electo, hace patente su rabia. De acuerdo con el diario Vanguardia de Coahuila, el exmandatario estatal, accedió a ser entrevistado a 22 días del asesinato de su hijo, José Eduardo Moreira Rodríguez a manos de los sicarios del cártel de Los Zetas, identificados como Carlos Arnulfo Flores Flores “El Flaco’’ y Rubén Sifuentes Cadena “El Shaggy’’. Es fuerte lo que dijo. Señaló a Rodolfo Castillo Montes, subdirector Operativo de la policía municipal de ciudad Acuña como el “Gordo ese del Castillo, desgraciado, que puso a mi hijo, que lo engañó, que le dijo: tengo una invitación que darte… Ese desgraciado tiene que pagarla el resto de su vida en la cárcel’’. Eso sería lo mínimo que pidiera un padre destrozado, sobre todo porque Castillo Montes es un servidor público, al servicio del gobierno de su hermano Rubén Moreira, actual gobernador del Estado. Pero lo más grave del caso es que acusó a empresarios coahuilenses de estar ligados a los cárteles de la droga, principalmente el de Los Zetas, que se han enriquecido con sus nexos con ellos para acumular enormes fortunas. Un agente del Ministerio Público de la Federación capaz. Lo llamaría a declarar de forma inmediata, dado que la muerte de su hijo se encuentra como investigación por delitos del fuero común por la Procuraduría General de Justicia del Estado de Coahuila (PGJEC), como por la Procuraduría General de la República (PGR), dado que existen indicios fuertes de delincuencia organizada en el crimen. En cualquier parte del mundo, ese tipo de declaración, sería materia judicial de una Fiscalía General. Pero hay que recordar que estamos en México. Y a fines del gobierno encabezado por Felipe calderón Hinojosa, el segundo consecutivo del Partido Acción Nacional (PAN), qué se puede esperar. El exlíder del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del Partido Revolucionario Institucional (PRI), expone que al igual que miles de padres de familia que han enlutado esta “guerra’’, se refiere a la declarada por Felipe Calderón en el 2006, aunque luego lo negó, quieren justicia “no venganza’’ y adelantó que no se quedará con los brazos cruzados. Sin embargo, lo más elocuente que sostiene Humberto Moreira, es que con el cambio de gobierno a partir del 1 de diciembre, cuando asuma el cargo Peña Nieto “El Astroboy’’, calificó a los empresarios que él sabe están ligados a los cárteles de la droga en Coahuila y los identificó como “narcoempresarios’’ al grito de “Cerdos, pónganse a temblar…’’. ¿Algo sabrá? CONTRADICCIÓN DE TESIS Sí hay elementos suficientes de responsabilidad, porque la Procuraduría General de la República (PGR), decidió arraigar por 30 días a Víctor Landeros Sifuentes “La Iguana’’ y Jorge Tenorio Takajasi “El Taka’’, si conoce que ellos, entregaron a José Eduardo Moreira a los sicarios de Los Zetas, “El Flaco’’ y “El Shaggy’’. No les parece inverosímil, cuando ya se van y quedan 37 días para resolver. ¿O será que conocen algo, que mejor le dejan la papa caliente al regreso de los priístas? ¡Es pregunta! RUBÉN TORRES rtorres@eleconomista.com