¿Qué es lo que paso? ¡Pues Tartamudeo!

Genaro García Luna, ínclito titular de la Secretaría de Seguridad Pública Federal (SSPF) dio cátedra de desfachatez y cordura de su profesión como ingeniero. Lo malo es que de procuración o impartición de justicia está negado y no creemos en México que todos los policías sean ignorantes, pero tal vez sí busquen la gloria, igual de quien desea ser el “Súper Policía’’ del Siglo XXI, antes que concluya el sexenio.
En su fluido léxico, agradeció al embajador de Estados Unidos en México el apoyo en la lucha contra el narcotráfico y el crimen organizado que libra el jefe de las Fuerzas Armadas, Felipe Calderón, su patrón directo. Esto luego que fueran entregados tres helicópteros “Black Hawk’’ para su corporación, comprometidos en la Iniciativa Mérida.
Pero donde no se midió fue en su discurso. Donde dijo que de acuerdo a los delincuentes detenidos o presuntos jefes o capos como los mencionan siempre su corporación de forma “oficial’’ u “oficiosa’’ que son la SSPF y su brazo ejecutor la Policía Federal así lo confesaron, que están minados, temerosos y huidizos.
Vean sino. García Luna, externó que los grandes capos detenidos por ellos han confesado en “vídeos’’ no autorizados, pero si aprovechados por “García Luna-Parra Productions’’ que la lucha frontal del Estado los “ha debilitado y degradado’’, mientras que el Gobierno se ha fortalecido.
No es claro. Les da credibilidad a sus “confesiones’’.
Pero después, en algo que no es común en él, ofreció una conferencia “extra’’ o “pilón’’ y jaló a los medios de comunicación para “platicar’’.
Horas antes se habían regodeado con bombo y platillo con un funcionario pequeño, de nombre Ramón Eduardo Pequeño, quién dio a conocer la captura de Carlos Montemayor González “El Charro’’, suegro de Edgar Valdez Villarreal “La Barbie’’ y lo relacionaron al secuestro-ejecución de 20 turistas michoacanos el 30 de septiembre en Acapulco, Guerrero.
Para García Luna, eso es “ley’’. Confesaron y por tanto fueron puestos a disposición de la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO) donde podrán ser acusados de esos crímenes y ya.

CONTRADICCÓN DE TESIS

Bueno para no hacer larga esta plática, en “su’’ conferencia fue cuestionado que algunos de esos detenidos, entre ellos Sergio Villarreal Barragán El Grande, integrante del cártel del Pacífico o Sinaloa, así lo dijo y por eso busca en la SIEDO ser “testigo protegido’’ y qué creen que dijo: No.
Porque claro es otro de los denominados “sucesores’’, “operadores’’, “herederos’’ o capos, si ustedes quieren entre otros tantos que han mencionado a sus “muchachos’’, hoy en altos mandos en su corporación, que protegen al cártel de Los Beltrán Leyva y El Pacífico de Joaquín El “Chapo’’ Guzmán, Ismael “El Mayo’’ Zambada y Juan José Esparragoza Moreno “El Azul’’.
¿Qué es lo que paso?
¡Pues tartamudeo!
Primero, dijo que lo del debilitamiento y casi, casi, que los “chillones’’ narcos, eso confesaron y que en eso se basa y fundamenta su declaración que atestiguó Carlos Pascual, nada más embajador estadounidense.
Un ministerio público le hubiera dicho: “fundamente, argumente y sustente’’.
Pero van a creer que cuando se toco a sus niños, Luis Cárdenas Palomino, coordinador de Seguridad Regional y Armando Espinosa de Benito de “Inteligencia’’, descalificó, porque se trata de “delincuentes’’.
Además contó que esos dos, fueron quienes dieron informes para las importantes capturas. Y ya sin nada más que argumentar dijo que “son delincuentes’’ a los cuales no hay que creerles, porque son eso.
¿Y entonces?
¡Unos sí y otros no!
Por eso mejor hay que recomendarle que acuda a la Escuela Libre de Derecho a prepararse como su Patrón, para no entrar a terrenos de la Chimontrulfia.

Rubén Torres
rtorres@eleconomista.com