¿Cómo ayudar a la República Amorosa?

Sencillo. Democratizar el pago de engomado vehicular, para no dejar circular un día o dos en la Ciudad de México. Primero, se cobró una jugosa cuota para anticipados y remisos disfrazado en tarjeta de circulación con “Chip’’, que rondó los 300 pesos.
Hoy, la ilustre Secretaría de Medio Ambiente, anunció que para poder andar por avenidas, Circuito y Periférico del Distrito Federal, vía Programa de Verificación, el pagó de quienes apoyan a Andrés Manuel López o no, violentando la Constitución de “libre tránsito’’, que claro ellos conocen, ahora tendremos que apoquinar “democráticamente’’ 369 pesos.
Y decimos democrático, porque los que cuentan con engomado Uno, Dos y “Cero’’, sin réplica alguna, habrán de erogar los 369 pesos, sin distingos de clase mala; baja-baja; baja-sube, media-media, media-alta o alta. Así aplicará en su primera verificación del 2012.
Ahora, se constata porque “El Rayito de Esperanza’’ López Obrador, ofreció a Marcelo Ebrard, la Secretaría de Gobernación a futuro, para resolver los problemas del interior en caso de llegar a la silla Presidencial en el 2012.
El juego estaba hecho. Primero se obligó a un cobro de unos 300 pesos para obtener la “tarjeta de circulación con Chip inteligente’’. Cuenten, nada más. Ahora van a tener que erogar los capitalinos 369 pesos democráticamente en esos engomados.
Y como López Obrador, dijo fuerte y claro, que no tiene nada contra los “ricos´´, el Gobierno capitalino, bajo el pago de la verificación a los automóviles que salgan de las agencias o concesionarias de vehículos, porque les hizo un favor ahora pagarán 369 pesos, cuando antes pagaban, 598 pesos, creo que se lo van a agradecer.
Los votos en la próxima contienda electoral, debe estar en la mente de los pudientes que sólo les clavó a los compradores de vehículos nuevos, una rebaja de 229 pesos.
Vamos a creerlo. Pero paso a paso. En 2011, los vehículos con calcomanía 1 y 2, pagaban cuatro salarios mínimos vigentes para verificar, que representaba un total de 239 pesos, cada uno, el holograma “0’’, pagaba cinco salarios mínimos vigentes en la Ciudad de México.
Ahora que la tal Secretaría, explique. Son 4 millones de vehículos que circulan todos los días en la Ciudad de México, independientemente qué calcomanía ostenten. Las concesionarias capitalinas, venden un promedio de 250,000 unidades al año.
¿Entonces, cuenten pues?
Es una fortuna. Cuántos de nosotros podemos comprar un vehículo nuevo cada año. Y qué pueden de decir los que seguimos en la misma unidad cada año.
¿Ojo, los números no son míos, ni de distribuidoras, sino de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF)?
Esto es, para que no me insulten. No es personal, ni contra el Pejelagarto; El Rayito de Esperanza o el nuevo impulsor, de la República Amorosa.
Estamos viendo a El Astroboy, Enrique Peña Nieto y los tres panistas, que este 3 de enero del 2012, habrán de partir la rosca de Reyes, unos quedarán fuera.

CONTRADICCIÓN DE TESIS

Que “Los Reyes Magos’’, cumplan todos los deseos, pero recuerdan. Es “actitud y aptitud’’, eso, nos llevará a algún lugar, del mejor que tenemos. Nadie más, ni Dios, ni el Horóscopo o la Suerte.
Será como lo dijo, el gran poeta centroamericano, el nicaragüense, Rubén Darío.
“Uno es el arquitecto de tu propio destino’’.



Rubén Torres
rtorres@eleeconomista.com