No hay esperanza, si diagnósticos y negro futuro

México seguirá padeciendo el embate del crimen organizado, principalmente la violencia del narcotráfico, aún después de concluir el gobierno del presidente Felipe Calderón. Hay diagnósticos, estrategias y fuerza del Estado, pero la cifra de 24,826 ejecuciones, solo esas, sin incluir “daños colaterales de la ridícula minoría’’ de víctimas civiles irán a la alza, prevé Arturo Chávez Chávez.
En un desayuno-conferencia y luego plática con los reporteros de la fuente que cubren la PGR, el titular de esa dependencia, descalificó a quienes hablan de narcoterrorismo en México, haciendo comparación a Colombia. “En México no existen evidencias de narcoterrorismo’’, para él lo ocurrido en la plaza de Morelia, Michoacán o el supuesto “autobomba’’ del jueves en Ciudad Juárez, no son indicios, sino hechos delictivos.
Chávez Chávez, comentó que en lo personal realizó un diagnóstico en la Procuraduría General de la República (PGR), que llevó a la consignación de más de 400 malos funcionarios públicos federales que incurrieron en actos ilícitos.
En qué basó la visión del negro panorama el Procurador. En un análisis que llevó a concluir que la situación del país sobre todo en narcoejecuciones, enfrentamientos y ajustes de cuentas desde inició de la actual administración se han contabilizado hasta la primera quincena de julio un total de 24,826 asesinatos violentos, que no tienen ninguna comparación en la historia.
Comentó que la estrategia está en marcha y la PGR respalda las acciones, aunque requiere “adecuaciones’’, no las enumeró. Pero si adelantó que la realidad fue dura, porque el crimen organizado y los cárteles de la droga “infiltraron’’ toda institución creadas para su combate.
Pero además con el amplio poder económico que conllevan sus ganancias ilícitas por el trasiego de drogas, tráfico de indocumentados, trata de personas, saqueo de oleoductos en Petróleos Mexicanos (PEMEX), robo de autos, pornografía y explotación sexual infantil, que es su principal ambición, ahora los “mutó’’ a la búsqueda del “poder político’’.
Lo que se ha observado en los últimos años. Y para ser explicitó realizó una parábola.

CONTROVERSIA

“Cuando un persona va caminando digamos por donde se construyen las nuevas instalaciones del Senado –en Paseo de la Reforma y París- y por descuido se clava una varilla en la pierna y se comienza a desangrar. Lo primero que busca es frenar el flujo de sangre. No buscar al responsable. Después ir a un médico u hospital para la atención, para de ahí pasar a la causa;
Porque puede ser que se infecte. Entonces comienzan las responsabilidades. En el caso de narcotráfico que se desatendió, ahora estamos tratando de frenar el sangrado. Pero, también se debe llegar a los responsables y es ahí donde los diagnósticos ya existen, la estrategia está siendo aplicada, ahora hay que ir por los recursos estratosféricos con que cuentan’’.
Así fue como diagnóstico el flagelo del tráfico de drogas en México. Tanto como las consecuencias que se están pagando en estos momentos. “Por tanto –sostuvo Chávez Chávez- el problema no se solucionará en los próximos dos años que resta al gobierno del presidente Felipe Calderón’’.
Pero confío que después, el gobierno que llegue podrá tener los elementos y análisis sobre la situación que impera en algunos Estados, entre ellos, Ciudad Juárez, Chihuahua, Sinaloa, Tamaulipas, Durango, Guerrero, bueno para qué seguir, casi todos.
Entonces qué nos queda. Tiempo al tiempo.

Rubén Torres
rtorres@eleconomista.com.mx