Todo por un calzón

Los tricolores unidos de El Astroboy, Enrique Peña Nieto, candidato único del Partido Revolucionario Institucional (PRI), están sufriendo por un calzón. Del boxeador mexicano Juan Manuel Márquez, quien dio una tunda a su rival el filipino, Manny “PACMAN’’ Pacquiao en las Vegas, Nevada, no Michigan, Estados Unidos, sino Michoacán, que ahora es cuadrilátero electoral ya del 2012.
A ese terreno subió la discusión de alto nivel político Juan Molinar Horcasitas, secretario del Partido Acción Nacional (PAN), al demandar del PRI ante el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) una “reparación del daño’’, no de mafiosos apostadores gringos, que vieron $$$$$$ perder al púgil azteca.
Sino de “apostadores’’ del narco y crimen organizado mexicanos que según ellos, ayudaron al PRI, arrebatar al PRD, la gubernatura del estado de Michoacán, con su abanderado Fausto Vallejo.
Ese fatídico 13 de noviembre del 2011 ocurrieron dos cosas. Le robaron la pelea a Márquez ante el “PACMAN’’ y Luisa María Calderón Hinojosa, hermana del presidente Felipe Calderón, de igual forma perdió los comicios, aunque los blanquiazules vociferaron su triunfo desde nantes.
La pelea Fausto Vallejo-Luisa María Calderón, fue más cerrada, según apoderados y entrenadores de ambos políticos. Pero el 28 de diciembre “Día de los Inocentes’’ el TEPJF determinó, anular las elecciones, pero en Morelia, no en todo el estado michoacano, que fue el intento panista de hacerlo más grande.
Pero como estamos en tiempos, que ellos dicen “pre-electorales’’, que más bien ya son electorales, Molinar Horcasitas, se atrevió a lanzar el petardo, que más bien es un buscapiés, para de ahí, demandar la anulación de las elecciones del Estado.
Ven lo que reflexiono el buen Horcasitas: “no me puedo imaginar un resultado diferente, estamos ante hechos similares, dados en el mismo espacio y el mismo tiempo para situaciones similares’’.
Esto, comparando que la victoria del candidato priísta a la alcaldía de Morelia, Wilfrido Lázaro, quien ya cayó de la gracia del TEPJF, debe ser medida con la misma vara que el triunfo de Fausto Vallejo, quien acabó con su triunfo con la hegemonía del Partido de la Revolución Democrática (PRD) –hoy una parte de las izquierdas- de gobernar Michoacán.
Sería tanto como decir que Felipe Calderón, es responsable de las violaciones a los derechos humanos o daños colaterales en las que han incurrido las fuerzas armadas en la lucha contra el crimen organizado y el narcotráfico.
¿No cree usted?
El argumento y sustento del PAN, para anular la elección del municipio de Morelia, capital de Michoacán, estuvo compuesto por 14 pruebas. Dos de ellas fueron reveladas nada más.
Que Wilfrido Lázaro, estuvo presente en un mitin, transmitido por televisión y otro más, el del calzón de Juan Manuel Márquez, donde portaba el logotipo del PRI.¡Qué imbécil fue el que lo promovió!
De los otros 12 sustentos, no se sabe nada.
Si van a salir que hubo apoyo del crimen organizado y los cárteles de La Familia Michoacana o Los Caballeros Templarios, eso sí sería una charada.
El presidente Felipe Calderón, ya echo mano de ese argumento y narcotizó las elecciones del 2012.
La pregunta sería ¿Para qué quiere La COCO-A, una entidad narcotizada? ¿Acaso aplicará el mismo cuestionado plan antinarco de su hermano o con que atacará lo que dijo su consanguíneo, que la delincuencia penetró a Michoacán?
¿Será?

CONTRADICCIÓN DE TESIS

Para que protesta El Astroboy o el promotor de la República Amorosa, Andrés Manuel López Obrador, sí sus institutos políticos, que hoy los impulsan, a través de sus legisladores en las Cámaras de Diputados y Senadores, aprobaron esa reforma electoral, que hoy los afecta o ven mal.
Más bien, deberían de jalar orejas a esos “científicos’’, “estudiosos’’ y “elegidos’’ legisladores que aprobaron junto con los del PAN la reforma electoral.
¡Carajo!
¿O no?


Rubén Torres
rtorres@eleconomista.com